TAPS 2: Capítulo 24

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Te Amaré Por Siempre 2:
A Un Paso de la Felicidad.

Capitulo 24: confusión

Pudo haber sido tal vez una alucinación de Peter, sus ganas de escuchar esas palabras, o su mente que le jugó una mala pasada. Pero no. No lo era. Era real, lo había escuchado, lo había dicho, ella, de sus labios había expresado sus sentimientos en el peor momento para hacerlo.

- ¿Qué dijiste?- preguntó separándose un poco, necesitaba escucharlo de nuevo.

-Si tus malas maneras incluyen sexo, tal vez de vez en cuando me ponga un poco… rebelde.

Él levantó una ceja, su esposa lo estaba seduciendo en medio de un caos, y él no podía simplemente hacerle el amor ya mismo porque literalmente estaban ardiendo en llamas y tenían que hacerse cargo de eso. Antes de que pudiera decir algo ella salió corriendo a dar órdenes a diestra y siniestra tal cual dueña era. Él duró unos segundos para entender la situación pero prefirió meditar más tarde, avanzando lentamente hacia el lugar del incendio, guiando quienes estaban más cerca del fuego. No duró mucho ya que Lali lo tomó de la mano y lo llevó con ella a la casa sin esperar siquiera que terminara.

-Mariana, no me voy a…

-shhhh.- lo silencio con otro beso – vigila que todo esté bien por acá.- susurró en sus labios, y él sonrió.

-me manipulas.

-descaradamente.

-no te acerques demasiado, por favor.

-solo lo suficiente.

Le dio otro corto beso y se despidió, Peter sin embargo le dijo a Feli que se encargara de todo y se fue tras Lali, que simplemente lo ignoró, no iba a seguir jugando al gato y al ratón. Organizó varias hileras de personas que se pasaban los baldes con agua unos a otros y luego de regreso los vacios, mientras en la casa y en toda salida de agua se llenaban.

Peter ordenó buscar varios extintores y les indicó el lugar, y al cabo de un rato tenía el fuego dominado y extinguido sin mayores contratiempos ni pérdidas de ningún tipo. Todos se tomaron un descanso, Peter y Lali se dedicaban a interrogar para saber cómo había empezado todo, no era común incendios en esa zona, aunque siempre se corre el riesgo. Según, fue accidental pero Lali lo dudaba, Peter estaba completamente seguro que no era así, que habían atacado de nuevo, la seguridad de su hogar se estaba tornando un problema sumamente grave.

Al caer la tarde, ya Peter estaba muy agotado, se sentó en uno de los banquitos de la cocina, mientras Lali terminaba de establecer relaciones sociales con la gente de la hacienda. Cerró los ojos y se recostó de una pared, despertándose con unos labios sobre los suyos.

-Estas todo manchado de hollín- él sonrió la tomó de la cintura y la sentó en sus piernas.

-Deberíamos bañarnos…

-Pitt…

-Odio que me hables con ese tonito. – expresó en tono ofendido pero sin levantar la voz ni abrir los ojos. – me andas frenando todo el tiempo como si estuviera haciendo algo malo, y no estoy de acuerdo.

-¿pero qué quieres que te diga? Aun estas convaleciente Peter, y se te ocurre cada cosa. No te creas que estoy muy contenta por verte metido dentro de ese alboroto.

-yo tampoco es que ando muy feliz. - Ella suspiró y entró en su mundo de pensamientos levantando de nuevo esa barrera que se empeñaba en mantener entre ellos dos. ¿Cuál era su problema? Si tenían que discutir lo hacían y punto. Si no quería hacerlo, podía decirlo también, empezaba a extrañar esa Lali impulsiva que era cuando se enamoró de ella y que cada vez salía menos, en realidad empezaba a extrañar la esencia de Lali, y de sí mismo. – Mejor me voy a descansar – suspiró y ella se levantó de golpe.

-¿te sientes mal?

-no, solo me duele la espalda.

-ve a acostarte, ya te llevo agua para que tomes tus pastillas.

Él subió sin discutir, por no ser impulsiva no la amaba menos, pero tampoco más, era solo una cualidad. En sí, lo que le molestaba, era ese problema de comunicación que parecían tener. Por lo visto un matrimonio es más complicado que tener sexo, criar bebes y soñar con ser felices por siempre. Llegó a su habitación  y se acostó en la cama tan pronto la vio.

            Lali no sabía que esperar a partir de este momento. Se sentía confundida y peor aún sentía que lo arrastraba a él en su mar de confusión, estaba demasiado agotada en ese momento como para seguir rondando el mismo tema, sin llegar a nada. Subió a la habitación y lo ve acostado en la cama, con la respiración lenta, profunda, y aparentemente cómodo. Llevaba la misma ropa, así que decidió ayudarlo quitándole los zapatos, desabrochando su camisa, y desabotonando el pantalón. Iba a bajar el cierre cuando una mano la detuvo.

-No me hago responsable de lo que pase si tocas ahí- le sostenía la mano apretándosela a su miembro, quien se desperezaba a pesar del cansancio.

-¿te estabas haciendo el dormido?- alejó la mano sentándose a un lado.

-bueno no me culpes por disfrutar como mi esposa me consiente-

-anda a bañarte-

-nooooo

–anda Pitt, para que duermas mejor.-

-la única forma de dormir bien es teniéndote a ti en mi cama.- levantó sus cejas sorprendidas sonriendo.

-¿supuestamente no estabas cansado?- Lali se cruzó de brazos.

-estoy hablando de dormir, aunque si quieres algo mas…- él la miró sugerentemente.

-Peter…-

-¿¡qué?! Es la verdad- colocó una mirada inocente que le robó una sonrisa a Lali.

-Deja de distraerme y anda a bañarte- le dio con un cojín.

-nooo….-

-anda que no quiero tener un marido mal oliente-

-estoy cansado-

-bueno yo si me voy a bañar- le da un beso en la mejilla y se levanta –insisto un baño te revitalizará y te hará sentir mucho mejor- salió de la habitación tan confundida como siempre.jo

No entiende esta relación que tiene con Peter, parecen quererse de a ratos, en otro momento se odian. No quiere volver al pasado, tampoco mirar el futuro y el presente es sumamente turbulento como para crear estabilidad. Confundida. Se rie de la simplicidad de la palabra ante el complejo caos en que se ha convertido su vida.

Quisiera que todo fuese tan fácil como salir de la “confusión” y pararse en frente de Peter y decirle todo lo que piensa y siente, pero el miedo parece consumir la poca valentía que tiene, se sentía agotada de siempre lo mismo. Mañana aclararía todo definitivamente, hoy simplemente se dedicaría a dormir.

Pero al parecer Peter tenía otros planes, ya que mientras Lali corroboraba que el agua estuviese tibia, él entró sin siquiera tocar la puerta. Ella no se sorprendió, una parte de si le decía que él iría a buscarla, otra parte estaba aterrada, de confundir mucho más las cosas.

-Decidí hacerle compañía a mi esposa- anunció quitándose el bóxer, sin dudar, sin pudor.

 Lali sentía como se le aceleraba el corazón y un corrientazo recorría su cuerpo solo con ese acto aparentemente casual, ¿confusión? Esto era más complicado que estar confundida.

Continuará…

Volví, créanlo… corran la voz =)

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G. M. Rojas