TAPS 2: Capitulo 18

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Todos tenemos una historia que contar…y las leemos en Noveladictas

Te Amaré Por Siempre 2:
A Un Paso de la Felicidad.

Capitulo 18: juntos

-no llegaste a dormir…- susurró Peter mirando hacia arriba, como si esa fuera razón suficiente, ella se acercó y le dio un beso dulce y provocativo en la comisura labial. Lali podía sentir la frustración de él por no poder lograr su sexual propósito.

-me quedé dormida-

-estas muy cansada ¿verdad?- le acarició la mejilla suavemente.

-y tu estas muy adolorido ¿verdad?- ella dejó un beso en la punta de sus nariz.

- en todas las partes que te puedas imaginar- respondió con un bufido haciéndola reír.

- mejor descansa, yo me voy a poner un pijama.

-¡noooooo!- se quejó y la abrazó por la cintura.

-¿Por qué no Peter?

-porque me encanta como estas vestida- dejó un beso en su oído y Lali rio.

-¡No voy a dormir así, Peter! ¿Sabes lo incomodo que es dormir con brasier?

-entonces quítatelo- recomendó pícaramente y ella soltó una carcajada.

-no tienes remedio.- dio una palmada suave en su hombro -Anda bebé, déjame ponerme algo más cómodo.- Peter la soltó a regañadientes y ella se cambio bajo la intensa mirada de él.

Se sentía insegura sobre cómo actuar, no habían hablado más con respecto a su separación, y no hallaba como desenvolverse antes la situación que Peter le planteaba, le daba miedo entregarse de nuevo sobre algo que parecía seguro, y luego decepcionarse, no sólo de él sino sobre sí misma por haber confiado.

Con la mente sumergida entre estos pensamientos, terminó acostándose en la cama lejos de su pareja. Peter estaba prácticamente en la misma disyuntiva que Lali, con la diferencia de que en este momento no le importaba, por lo tanto, se limitó a acercarse hasta ella y pasarle el brazo sano por su cintura mientras se acomodaba a su cuerpo.

-Pitt…- susurró.

-¿mmm?

-suéltame, t…

-Estoy dormido- le interrumpió con ojos cerrados y dio un ronquido que hizo que Lali sonriera, a veces él podía parecer tan niño.

-Pitt, suéltame.- pidió de nuevo, suavemente.

-estoy cómodo- murmuró en su cabello.

-¡Peter, por Dios!-

-Lali- aclaró la voz levantando la cabeza para mirarla a los ojos.- No me pienso mover; así que si te quieres separar vas a tener que ser muy cruel y forzarme con el riesgo de hacerme daño porque no voy a poner en absoluto de mi parte para alejarme de ti- replicó con todo el doble sentido que se pudiese interpretar.

-yo no te quiero hacer daño- respondió en un murmullo. Y se giró hacia él- yo te quiero Peter… te quiero muchísimo, y te lo demuestro cuidándote. ¿Tú entiendes eso?

-¿Cómo no lo voy a entender si quererte es el único idioma que yo hablo?- ella sonrió y él dejó un beso en sus labios, luego él se recostó en su pecho, y con caricias de Lali en su cabello se quedó dormido.

.-.-.-.-.

Eran aproximadamente las 10 de la mañana cuando Feli comenzó a preocuparse por la ausencia de Lali, por lo general se levantaba temprano para subirle el desayuno a Peter, pero supuso que se quedó dormida por el cansancio de los últimos días,  así que optó por prepararlo ella y subió a dárselos a ambos; sin embargo,  cuando entró al cuarto de Peter solo se encontró con sábanas revueltas y vacías.

 Extrañada, buscó en el baño y echó un ojo al otro cuarto, para no dejar ningún sitio sin revisar y allí los encontró, dormidos. Con una sonrisa cómplice dejó la bandeja a un lado y salió sin hacer ruido, feliz porque las cosas estuviesen mejorando entre ellos.

-Buenos días- le dijo Belén cuando se la encontró cuando salía de la habitación.

-buenos días- respondió Feli  con una sonrisa - yo que tu no entraría – advirtió cuando la vio intentando pasar a la habitación de los recién reconciliados.

-¿Por?

-porque duermen.

-bueno en ese caso ya es hora que Peter despierte- intentó entrar de nuevo y Feli la tomó del brazo.

-Están durmiendo los dos Belen, dales descanso.- de algón modo Belén se dio cuenta exactamente a lo que ella se refería, más no lo quería creer.

-¿duermen juntos?

- si

-¿Los dos en la misma cama?

-bueno, son esposos nena, y además están recién casados, ¿qué esperas?

Feli le dio la espalda para seguir con su camino, y Belén quedó afuera pensativa, llenándose de ideas y planes que poner en marcha debidamente para separarlos de nuevo, si pudo una vez, repetirlo no debía ser tan difícil. Sin meditarlo, entró al cuarto donde estaban y los despertó.

-¡¡Buenos días!!- casi gritó y Lali se removió. Peter se tapó los ojos con una mano un poco confundido. - es hora de levantarse ya amaneció.

-Belén, baja la voz y déjanos dormir.

-vaya Pipu, por lo visto pasaste una muy mala noche porque amaneciste súper gruñón.- dijo con todo su veneno.- además estoy aquí por un motivo.

-mi noche fue perfecta, lo que me tiene de mal humor es…-

-¿Qué necesitas Belén?- preguntó Lali interrumpiéndolo, un poco más serena.

- A ti, bueno en realidad lo que necesitan es la presencia de un líder, ¿sabes? Los trabajadores y eso…

-Dile a Rochi. – se quejó Peter nuevamente, abrazando a su esposa para que regresara a dormir con él.

-en unos minutos estoy abajo- declaró ella. Belén solo los veía – ¿algo más?

-no-  los miró despectivamente, con resentimiento, con envidia…  después de uno segundos, se giró y se fue.

-¡oh por Dios, me quedé dormida!- comenzó a apartar las sabanas a medida que se desperezaba pero Peter no quitó su mano de la cintura.

-nooo, no te vayas.

-a veces siento que tú tienes mucho que ver con que mi despertador no haya sonado.

-¿qué hay de malo en querer descansar un poco con mi mujer?

-que tu mujer se tiene que ocupar de ciertos asuntos que no dan tregua.

-oh, vamos Lali, ya les pagaste, no debe ser nada importante.- le dio un beso en su mejilla, y se acomodó en su cuello para seguir durmiendo.

-si todo lo puede Belén me vino a buscar debe ser por algo.- silencio- ¿Peter?

-estoy dormido, no te escucho.

-¡oh vamos! no seas bebé, además te toca tus pastillas, tu desayuno…

-está bien, está bien…. No insisto más, pero que se haga constar que no quiero que vayas.- la soltó y se rodó a un lado. Ella se sentó se acomodó un poco y se levantó riéndose de la cara de enojo que tenía Peter.

-a veces eres taaaaaaaaaaan infantil- le dio un beso en su mejilla y salió corriendo (antes de arrepentirse y volver con él a la cama) a comenzar su día.

Continuará…

Volví, créanlo… corran la voz =)

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G. M. Rojas