TAPS 2: Capitulo 19

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Todos tenemos una historia que contar…y las leemos en Noveladictas

Te Amaré Por Siempre 2:
A Un Paso de la Felicidad.

Capitulo 19: bebé

Ese día Peter, luego de que Lali se fue, durmió un poco más, creía que los medicamentos eran los que le daban tanto sueño, además, quería recuperarse pronto, tenía la misión de re-enamorar a su mujer, sin discusión. Al mediodía se extrañó que Lali no hubiese pasado para saber cómo estaba, hecho que le molestó un poco ya que postrado en esa cama se sentía inútil.

-Buenos mediodías dormilón.- irrumpió dulcemente su cavilaciones, en la habitación.

-Buenas Feli- apenas murmuró.

-¿Cómo te sientes?

-Frustrado- refunfuñó- ya me quiero valer por mi mismo.

-Todo es cuestión de reposo, niño Peter.

-¿Lali?

-en la hacienda- le colocó la comida cerca

-¿no ha venido a almorzar?

-no, por eso le mande la comida con Rochi. Esta muy entregada a sus funciones- la alabó y le puso una servilleta en sus piernas, con cariño.

-no tengo hambre aún.

-¡pero si ni siquiera has desayunado! –él revoleó los ojos- Come algo o la niña se va a molestar conmigo, y lo sabes- le amenazó, tomó una cucharada de sopa y le hizo el avioncito- Vamos niño Peter, no seas así conmigo que lo hago por tu bien.

Ante esa petición no le quedó más remedio que ceder, pero a lo que se negó rotundamente fue a tomarse los medicamentos sin Lali, pidió, no, ordenó que la fueran a llamar pero ella jamás llegó. Belén subió varias veces al cuarto a ver como seguía, pero el mal humor de Peter la corrió. Feli subió par de veces pero estaba completamente negado, e incluso se fingió dormido par de veces para que lo dejaran en paz.

Y para más añadidura, Lali no apareció en todo el día porque estuvo ocupada recorriendo la hacienda, interactuando con los trabajadores, aprendiendo un poco más con respecto a todo lo que tiene que ver con ese mundo, algo completamente diferente a lo que se dedicaba antes, pero con lo que increíblemente estaba deslumbrada. Sus pensamientos tomaron su propio rumbo cayendo en su padrino y Cande, pensando en que no se habían preocupado por ella en todo ese tiempo, suponía que deberían estar bien, y con la situación de Peter, su mente no dio para más y siguió en su trabajo.

En la noche, cuando Lali llegó a la casa, encontró a Feli hablando sola en la cocina.

-… entonces yo hago las cosas por su bien, y después llegan y me tratan mal, te lo puedes creer San Judas Tadeo ¿ah? Y luego seguro que viene…-

-¿hablando sola Feli?- bromeó sentándose en un banco, simplemente agotada.

-¡¡Niña!! ¡¡Al fin llegas!!- exclamó con tanto entusiasmo que Lali se preocupó.

-¿Por qué? ¿Pasó algo? ¿A Peter le pasó algo?

-No, no, no... Él está bien… bueno… en realidad no, bueno si…

-asssh, Feli deja de divagar y dime qué le pasó, que me pones nerviosa.

-No quiso que nadie que no fueras tu le hiciera nada ¿puedes creerlo? Que si no iba a comer esperándote, que si no se tomaría el medicamento si tu no ibas, que no se iba a bañar si tu no aparecías, nada de nada. – se colocó una mano en la cintura indignada. Lali se habría reído si no estuviese enojada por la actitud infantil de su marido.

-¿ah si? ¿o sea, qué éstas son horas en la que Peter no ha comido?

-no, si comió algo porque lo obligué, pero del resto, nada de nada.  Imagina que ni siquiera Belén se ha acercado porque no lo soporta

-bueno, en ese caso, no esta tan mal- las dos rieron.

-me alegra que las cosas estén mejorando entre uds dos.- Lali dio un suspiro y se tomó un vaso con agua.

-Estaban Feli, porque ahora sí que me va a escuchar.

-.-.-.-.-.-

-¿me puedes explicar qué está pasando aquí?- entró Lali a la habitación tratando de controlar su molestia, él la miró levantando una ceja y ella comenzó a enumerar con los dedos - no has comido, no te has tomado tus pastillas, no te han curado, no te has bañado, y nada tiene que ver con que no tengas quien te lo haga porque ya me contaron que has pasado el día un humor que no hay nadie que se te acerque y te soporte- él no dijo nada, solo la miraba- ¿no piensas decir nada?

-te extrañé- ella bufó, camino hacia la mesa de noche y tomo sus pastillas para dárselas con un vaso de agua.

 -Peter, es ridículo que te pongas en ese plan cuando lo que necesitas es RECUPERARTE, ¿o es que acaso lo haces apropósito?- silencio - ¡habla hombre!

-pasaste todo el día en la hacienda.- comentó displicente, como si eso lo explicara todo.

-estaba trabajando.

-¿ni siquiera viniste a la casa una sola vez?- preguntó suspicaz.

-¿¿Lo hiciste apropósito solo para llamar mi atención?? ¡¿¡Te das cuenta de lo ridículo y obsesivo que suena eso?!?

-yo quería que estuvieses aquí.

-eso no es justificación.

-para mi si,

-¡oh por Dios.! – levanto ambos brazos hacia arriba como pidiendo ayuda divina.

-La… no te enojes, no pasa nada, solo acércate y dame un beso, y ya.

-¿y ya? ni sueñes con eso, ahora vas a comer y te vas a bañar y no quiero… - Peter se tomó el brazo que le dolía de repente y Lali se acercó preocupada- ¿qué te pasa?

-me duele- ella se acerca aún mas.

-¿dónde?

-aquí en el corazón.- dijo con una media sonrisa a la vez que le robaba un beso.

-Peter eres un….

-no me regañes bebé, solo quería estar contigo- susurró dulcemente y le acarició el rostro.

-bebé eres tú, ¡mira como te portas!- bajó el tono de su voz a uno más conciliador, como intentando hacer comprender algo a un niño.

-te juro que si comí, luego, cuando se fueron y no venías, me dio hambre…- ella intentó no reír.

-¿y los medicamentos?

-olvida eso, sabes que no me gusta tomar pastillas.

-es tu s…

-salud- complementó él – si, ya lo sé, pero mi salud es Lali dependiente.

-no me vas a convencer con tu palabrería barata Lanzani, estoy enojada contigo y…- beso- no se me va a quitar- beso- solo porque me beses.

-eres una chica dura… y muy cruel.

-sí, don “yo soy la víctima” párate para darle un baño a ese mal oliente cuerpo.

-por eso no te querías acercar a mí, ¿verdad?- bromeó y ella suspiró.

-párate a bañarte Lanzani.

-no me vas a dejar solo allí dentro.

-tienes edad suficiente para bañarte solo.

-pero no tengo las condiciones físicas, ¿y si me caigo, y si me duele?

-gritas.

-eres cruel

-y tu, un inconsciente.

Peter se levantó adolorido, y Lali le colocó una silla en la ducha para que no estuviese mucho tiempo de pie. Al llegar, lo ayudó a desvestirse, susurrando perversiones sexuales a su oído cada vez que podía, ella no pudo evitar sonrojarse cuando después de que él se sentara se percatara de que su pene estaba erecto.

-¡ya!- le echó un poco de agua de la ducha que estaba medio abierta en la cara, él rio.

-La, no me ahogues.

-Eres un exagerado y un pervertido.

-bueno nena, pero es que esta erección pide a gritos tu cuerpo.

-Te voy a dejar solo Lanzani.- amenazó y tomó el jabón y se lo dio.

-¿esto es para ayudarme con la masturbación?- ella revoleó los ojos y tomó shampoo para lavar su cabello- insisto, deberías probar el sexo oral aunque solo fuera una vez, te juro que te va a gustar y a mí también.- ella no dijo nada- ¿me estas escuchando?

-en realidad, intento ignorarte.

-Claro, tú me ignoras y él sufre.- ella rio, amaba a este hombre, así de loco y todo. –vamos a hacer algo, dame un beso y dejemos que la pasión guíe el resto.- Lali soltó una carcajada y abrió más la ducha para quitarle el shampoo y el jabón, y ella se echó para atrás para no mojarse.

-No tienes remedio.

-tú eres mi remedio, sin embargo me lo niegas.- le salpicó un poco de agua.

-Agua fría debería dejar salir, para bajarte los humos y otras cosas.- él sonrió pícaramente.

-Pásame el jabón de nuevo, por favor- ella se acerco con cuidado, pero antes de poder hacer nada él la halo y ella cayó en sus piernas de un solo golpe. Todo el dolor lo sintió en la herida, pero no quiso decir nada por haber logrado su propósito.

-¡Peter! ¿Ves que eres un inmaduro inconsciente? Seguro que…-

No pudo decir más porque el capturó sus labios, al principio intentó alejarse, pero luego de absorber un gemido de Peter no pudo hacer más que corresponderle con la misma pasión.

Continuará…

Volví, créanlo… corran la voz =)

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G. M. Rojas