TAPS 2: Capitulo 4

Gracias por volver…. Recuerden: todos tenemos una historia que contar…y que leer en Noveladictas

Te Amaré Por Siempre 2:
A Un Paso de la Felicidad.

Capitulo 4: Despertar

-¿Peter? ¡¡¡¡Peterr!!!!- gritaba Lali agitada moviendo su cuerpo.

-¡Tranquila Niña! Es por la fiebre- le informó Feli quien pasaba uno de los paños por la frente de él.

-Esto no está bien Feli, él se tiene que recuperar- prácticamente le suplicaba con sus ojos que se salvara.

-y lo va a hacer, confiemos en que así sea.-

         En el acto llegó Belén con el agua y los paños y Feli comenzó a pasárselo no solo por la cabeza, sino también por las partes del cuerpo que eran visibles. Así estuvo alrededor de una hora ayudada por Belén y Lali quienes optaron por no dirigirse la palabra mientras estaban en su faena. Rato después Peter comenzó a temblar, Lali no podía verlo así.

         Feli decidió irse a continuar con sus labores y a regañadientes se llevó a Belén, y Lali continuó poniéndole paños en la frente y limpiando su cuerpo. Rocío llegó y a ella le dio tiempo comer y cambiarse de ropa por algo más cómodo en menos de 15 minutos, regresó enseguida cuidándolo e intentando bajarle la fiebre.

         Así pasó toda la noche, entre delirios de Peter que se entendían muy poco, y ella luchando en contra de su temperatura. El día siguiente en la mañana comenzó a pedir agua, pero apenas se le entendía y no parecía muy consciente de la realidad, aún no abría los ojos ella se la dio e intentó hablarle pero él en seguida se quedó dormido nuevamente.

         El doctor fue y le dejo indicado unos medicamentos además de la limpieza de la herida que tenía en la espalda, había sigo profunda así que el reposo debía ser absoluto aunque despertara, le informó que estaba fuera de peligro y que solo faltaba que se le quitara la fiebre para darle el alta.

         Le comentó que llegaron los resultados de la muestra de sangre y efectivamente era curare, como dato adicional comentó que el veneno que le dispararon a Peter estaba a dosis de una mujer, por ese motivo les dio tiempo salvarlo, de lo contrario nada hubiesen podido hacer; con eso Lali asoció que tal vez había sido Gastón y que era para ella, pero en este momento no tenía cabeza para pensar en ello.

         Lali no soportaba ver a Peter tan débil, no se despertaba, no se movía, ella no le quitaba los ojos de encima en ningún momento por miedo a que dejara de respirar. Ya en la tarde no soportó más, el doctor dijo que en un día iba a estar bien y había pasado día y medio. Peter no comía, ¿Cómo se iba a despertar si no comía? Por eso, en cuanto Belén llegó a ver a Peter, ella le pidió que se quedara con él mientras ella llamaba al doctor para preguntar si eso era normal o no. Evidentemente Belén no se negó y como una casualidad bastante mala Peter se despertó.

-Lali…- murmuró entre dientes abriendo poco a poco los ojos, la luz le molestaba pero su visión se acomodaba.

-¡¡Peter!!- exclamó ella sorprendida… - ¿Peter como te sientes?- preguntó preocupada tomando su mano.

-¡bien!- dijo dando una profunda inspiración, intentó incorporarse pero el dolor no se lo permitió.

-No te muevas, apenas y puedes hablar.-

-Estoy bien Belén, no te preocupes- su voz era ronca, tal vez por los días que tenía sin hablar - ¿ y Mariana?- preguntó con la esperanza de que se hubiese quedado, aunque el disparo fue su culpa, algo de preocupación tuvo que haberle causado.

-¿Mariana?- él asintió levemente -¡ah! Lali… emm… no sé-

-¿cómo que no sabes?-

-¡No lo se! Desde que se fue, no la he visto-

-¿Y sabe lo que me pasó?-

-¡claro! ¿no lo vivió contigo?- el dolor afectó su corazón tal vez con más intensidad que la misma herida que tenía en la espalda.

-¿ha llamado?-

-No que yo sepa… pero si quieres pregunto y…-

-No lo hagas, no es necesario-                       

-¡No Peter en serio! Tal vez no es consciente de que estuviste a punto de morir y así viene- propuso con una falsa preocupación que sólo una persona convaleciente como Peter creería.

-No lo hagas he dicho- repitió y repentinamente se sintió muy cansado otra vez- ahora si me dejas sólo puedo dormir-

-No me parece, deberías comer y…-

-Belén…- la interrumpió- tengo sueño, ¿me dejas dormir?- dicho esto cerró los ojos y giro su cara de tal modo que ella no lo viera.

-Esta bien- aceptó y se acercó un poco a su oído susurrando decía- solo quiero que sepas que te quiero, y que yo estaré aquí siempre esperándote. Así como estuve con tu accidente estaré cada vez que me necesites, porque te amo- besó su mejilla y sentó cerca acariciando su cabeza.

Peter no pudo evitar dejar salir una lágrima que limpió con disimulo, ¿por qué Lali le tenía que hacer esto? No pedía abnegación, pero quedarse en su habitación aunque sea para saber si despertaba o no le parecía suficiente, y de repente nada de lo que tenía le parecía lo suficientemente importante como para luchar por vivir.

Continuará…

Volví, créanlo… corran la voz =)

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G. M. Rojas