SIMPLEMENTE GRACIAS…
Todos tenemos una historia que contar…y las leemos en
Noveladictas
Te Amaré Por Siempre 2:
A Un Paso de la Felicidad.
A Un Paso de la Felicidad.
Capitulo 27: quiero salir
-¡Vamos Peter!- insistió
empujando su hombro una vez más, el fastidio y el aburrimiento eran notables en
su tono de voz.
-Deja la joda La, ¡no quiero
ir!- respondió aburrido del tema, sin quitar la vista del computador. Estaba
concentrado en los correos que había dejado de leer en estos días debido a
ocupar a su esposa en otras cosas, pero no podía atrasar por tanto tiempo el
trabajo. Su jefe no era de los que se quedaba tranquilo y todo estaba demasiado
tranquilo.
-¡nunca quieres ir a ninguna
parte!- golpeó suavemente su hombro pero este ni se inmutó.
-siempre voy a donde tú me
digas.- respondió sin ningún tipo de emoción.
-siempre y cuando estemos
encerrados en estas 4 paredes.
-salimos a la hacienda La, no exageres, bastante grandecita que es.
-no salimos de la hacienda Peter que es diferente.-
haciendo énfasis en justamente eso que le tenía aburrida.
-esa es una forma de ver el
vaso medio vacío.- hizo doble clic a un link que abrió una ventana
aparentemente inocente pero era un mensaje oculto de su jefe. Estaba muy
paranoico, y más los últimos días cuando aparentemente han entrado llamadas a
la casa de personas que no responden el teléfono y la familia de Lali había
estado más aislada de lo aparentemente normal.
-yo no veo ningún vaso, lo
único que quiero es conocer mas allá de…- miró a su alrededor- esto.
Y así es, como de nuevo
entraban en el tema delicado para Peter, salir de la hacienda, y así es como
Lali seguía insistiendo una vez más con el mismo tema.
-¿No te gusta la hacienda?- la
miró por primera vez en la conversación .
-¡Peter! ¡¡¡Entiéndeme!!!
¡¡Qui-e-ro sa-lir!!!- expresó exasperada.
Peter revoleo los ojos e ignoro
lo que Lali le decía, a tal punto que casi ni le escuchó lo que dijo después,
llevaba un mes con el mismo tema y él llevaba todo ese tiempo haciendo lo
mismo, tratando de distraerle de diferentes formas, que si le dijo que
remodelara la habitación y admitía que ella tenía buen gusto, que si le mostró
cada rincón de la hacienda, ¡ah! también hubo muchas noches y días de pasión,
definitivamente esa era la mejor parte. Sonrió para sí mismo y pensó que a ese
ritmo tendrían hijos muy pronto, ¡Por fin tendría una familia! ¿Quién diría que
Peter Lanzani se sentiría feliz ante esa idea?, ensimismado en sus pensamientos
no escuchó nada de lo que decía su esposa y solo, cuando Lali dijo algo con
salir y sola en la misma frase, recordó que ella estaba allí.
-Detente- dijo levantándose y
tomándola suavemente del brazo.
-No Peter, es un fastidio estar
aquí- se soltó sin el más mínimo esfuerzo.
-Tú no vas a salir-
-¿Y que? ¿Me vas a apresar.?-
se cruzó de brazos.
-Obvio no La, es que tengo
mucho trabajo- la tomó por la cintura- entiéndeme ¿si?
-yo te entiendo Peter, quien no
me entiende eres tú – jugó con los botones de su camisa- tenemos un mes que no
salimos de la hacienda, ¿no te apetece hacer algo diferente?
-No
-Ay, vamos, salir a la calle,
ver tiendas, caminar por la plaza…
-Hacer cosas de chicas
básicamente.
-No necesariamente. Nunca
tuvimos un noviazgo muy normal que digamos, podemos vivir cosas de parejas.
-Aquí podemos hacer cosas de
parejas mucho mas divertidas.
-E-N-T-I-E-N-D-E-M-E
Le dijo muy lentamente como si
no hablasen el mismo idioma.
-Laaaa- se quejó como un niño.
-¿Si?- le apretujo los cachetes
y en cuanto miro esos ojos sabía que había cometido un error, ella había
ganado: lo convenció.
-Ok, ok vamos a salir-
De camino al centro Peter
sonreía mientras veía a su esposa ver a su alrededor, de verdad estaba
profundamente enamorado de esa mujer, cada célula de su ser estaba tatuada por
los sentimientos que sentía por Lali, y eso mismo le había llevado a protegerla
al extremo, había mejorado la seguridad de su hacienda en cantidades
exponenciales, ella le hizo par de preguntas al comienzos pero bajo la
justificación del ataque y del incendio cesaron las mismas.
Llegaron por fin a la ciudad
más cercana a 45 minutos de la hacienda, y Lali se veía simplemente feliz, en
su ambiente, caminaba rápido, lento, hablaba, saltaba, reía. Él se quedaba
deleitándose y deteniéndose en par de tiendas para comprar ropa más acorde al
clima caluroso. Su mente de repente viajó hasta su jefe, lo tenía preocupado,
no había hecho absolutamente nada últimamente, solo mandar correos pidiéndole
información sobre viejos casos.
Estaban caminando por uno de
los pasillos de la plaza y algo llamó su atención, no se equivocaba, el nunca
se equivocaba: uno de los secuestradores. Estaba seguro, trabajó con él tiempo
atrás solo que ahora con gorra y lentes de sol no estaba claro en quien era,
aunque reconocía su andar, era sagaz, tan sagaz como seguramente el mismo le enseñó.
-… los rojos son los mejores-
dijo Lali distraída en una vitrina de zapatos-ooooohhh!!! y además tienen
descuento!!.
-si, ehhh. ¿Bebé?-
-¿uhm?- Preguntó sin quitar la
vista de los zapatos.
-voy a estar por allá- dijo
señalando ningún punto en específico. –¿será que te quedas aquí? No tardaré-
-sí, yo miraré adentro.- le dio
un beso en la mejilla distraída de su esposa y fue a buscar al susodicho.
Éste apenas se percató que
Peter lo vio, quiso salir huyendo, pero al darse vuelta chocó con un carrito de
mercado, volcándolo sin querer y enredándose con las bolsas que estaban dentro.
Ese alboroto le dio tiempo a Peter de alcanzarlo, sin embargo, muy ágilmente
giró y le dio un puñetazo en la mandíbula a Lanzani que lo mareó, dándole
segundos de ventaja, que no le sirvieron de mucho ya que igual le alcanzó y se
le abalanzó encima, apenas tocó el suelo le puso las manos atrás y lo
inmovilizó.
-¡¡¡El jefe te mandó!!!- grito
a su oído mientras a su alrededor llamaban a la policía.
-¡¡¡¡Ya hermano!!!!
-¡¡Me dispararon!!! ¿¡Fuiste
tu!?
-¡!!!no, no fui yo!!!. Pero no
era para ti, era para tu esposa.
-¿qué?- ese momento de sorpresa
lo aprovechó para liberarse y salir corriendo.
Peter no perdía de vista la
tienda donde estaba su esposa pero tampoco podía perder el rastro de ese tipo,
entre ese punto otro golpe atesto contra su cara tomándolo de sorpresa y
capturándolo hacia un pasillo, en un callejón sin salida.
Continuará…
Volví, créanlo… corran la voz =)
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NUEVO capítulo Sábados.
Los comentarios para un escritor, son los aplausos de los artistas.
G. M. Rojas
Extrañaba tu nove, que bueno que volviste :)
ResponderEliminarMe gusto el capitulo y ya quiero saber que pasara.
Saludos